Sinología: Ascenso Pacífico y Poder Blando

In by Andrea Pira

Algunos académicos consideran la expansión de las inversiones, la influencia económica y cultural de China en América Latina como una manifestación del “poder blando”. Este criterio está basado en la no intervención militar china en la región para salvaguardar sus intereses, pero también en la exigencia de Beijing de negar el reconocimiento diplomático a Taiwán, de acuerdo con su política de unidad, a cambio de ayuda, donaciones y vínculos sociales y culturales.
Compartimos un extracto de la tesis doctoral La política de Estados Unidos, Unión Europea y China con respecto a América Latina: resultados y perspectivas en la integración económica global de Wu Yin-Shi, en la que se profundiza en algunos aspectos de este denominado “poder blando” chino en América Latina. 

China en Latinoamérica: Ascenso Pacífico y Poder Blando

China ha demostrado su importancia en la política y la economía mundial al apoyar el plan de recuperación global del primer ministro británico Gordon Brown en abril de 2009. Pekín ya ha adoptado una política exterior de compromiso internacional en línea con la política trazada de grandes estrategias, política de seguridad, cultura y comercio en un sistema multipolar.

Tras su ingreso en la Organización Mundial del Comercio (OMC) en 2001, China ha afianzado sus intereses en política y economía internacional en el Hemisferio Occidental a través del libre comercio la búsqueda de recursos naturales y el fomento de la relación Sur-Sur desafiando la hegemonía estadounidense.

En 2008, Pekín publicó sus proyectos oficiales a largo plazo en el boletín oficial del gobierno chino, Policy Paper on Latin America and the Caribbean, que avala su presencia creciente y pacífica con el objetivo de consolidar su posición como gran potencia en Latinoamérica. El gobierno chino ha lanzado una estrategia de expansión económica (en inglés, China’s economic rise) que garantice su acceso a las materias primas y recursos naturales en el sistema mundial.

El libre comercio e inversión extranjera directa de China crecieron de forma rápida e imparable, ofreciendo una nueva alternativa al modelo de la Unión Europea y EEUU en Latinoamérica.

Según el informe de 2010 de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), China es uno de los principales destinos hacia donde van dirigidas las exportaciones latinoamericanas, y “se ha convertido en un socio comercial estratégico para América Latina y el Caribe.

Además existen amplias oportunidades para lograr acuerdos de exportación e inversión en campos como la minería, energía, agricultura, infraestructuras, ciencia y tecnología.

En efecto, los acuerdos de libre comercio entre China y los distintos países latinoamericanos fomentan las importaciones y exportaciones de recursos naturales y materias primas entre ambas regiones.

China debe elaborar una nueva estrategia política y económica exterior en Latinoamérica para adaptar su expansión económica y presencia internacional a la competencia que presenta la hegemonía de Estados Unidos en el Hemisferio Occidental en el siglo XXI.

En términos globales, Latinoamérica es la región más importante para China gracias a sus recursos naturales, mano de obra barata y mercado de libre comercio para sus socios extranjeros, especialmente EEUU y China.

China ha implementado su política exterior con un enfoque multilateral que no sólo ha favorecido su expansión a nivel global, sino que también le ha permitido ejercer una gran influencia política en la cooperación realizada con los países latinoamericanos.

El país ha adaptado sus relaciones bilaterales con Latinoamérica en consonancia con sus preocupaciones políticas y la transformación hecha en su economía orientada a la exportación. En términos económicos, China ha querido obtener materias primas de estos países y al mismo tiempo impulsar sus exportaciones hacia Latinoamérica.

Desde un punto de vista político, China estableció relaciones diplomáticas con los países latinoamericanos con el fin de impedir el reconocimiento de Taiwán y balancear a los valores e intereses de EEUU en el continente americano.



Los observadores, analistas y académicos que han investigado el ascenso político y económico de China en Latinoamérica se han centrado en la expansión económica del país en proyectos de cooperación y competitividad en la región. El informe del Banco Mundial y la Comisión Económica para América Latina y el Caribe sugiere que los países latinoamericanos aceptan la inversión directa china en apoyo al desarrollo de sus exportaciones y el crecimiento de la economía. Dichos organismos consideran que el fenómeno chino estimula positivamente el crecimiento económico tras la crisis financiera internacional.

Algunos académicos se han dado cuenta de que la creciente presencia china en Latinoamérica incide en la expansión de las inversiones en lugar de centrarse principalmente en las cuestiones políticas y de seguridad que presenta el modelo estadounidense. Adrian H. Hearn y José Luis León-Manríquez han analizado la trayectoria china en materia diplomática, cultural y comercial en Latinoamérica.

Por su parte, Riordan Roett y Guadalupe Paz afirman que el fenómeno de la “emergencia del dragón en Latinoamérica” podría ser pacífico dependiendo de las consecuencias políticas y económicas que acarrearía para América Latina y Estados Unidos.

En su análisis, estos autores indican con respecto a la prioridad política china de impedir el reconocimiento de la República China de Taiwán (política de unidad china) que “China ha promovido una combinación de comercio, ayuda y vínculos sociales con comunidades chinas en el extranjero para proseguir con su batalla diplomática con Taiwán siguiendo una estrategia de ‘política multidimensional’.

Todos coinciden en que China no representara un desafío para la hegemonía estadounidense a corto plazo sino que fomentará las relaciones Sur-Sur a través del libre comercio en Latinoamérica.

Académicos de todo el mundo han estudiado los elementos geopolíticos del ascenso económico chino y su repercusión para el triángulo China-América Latina-Estado Unidos en un futuro próximo. Francisco de Santibañes defiende que la penetración política china en Venezuela, Brasil y la Organización de Estados Americanos pondrá en riesgo los intereses estadounidenses en Latinoamérica, advirtiendo que “si nada cambia, Estados Unidos podría perder tanto su influencia como su capacidad para arbitrar conflictos entre los estados latinoamericanos.

Por el contrario, Pekín ganaría socios estratégicos en el conflicto con Washington (Francisco de Santibañes, An End to U.S. Hegemony?: The Strategic Implications of China’s Growing Presence in Latin America, 2009) en el continente americano.

La académica estadounidense Cynthia McClintock considera que China sustituirá a Rusia como la principal fuente de ayuda política y de inversiones en Cuba, y cooperará muy de cerca con el gobierno de Venezuela. Añade que EEUU debería comprender la implicación política china con democracias no liberales, especialmente Cuba y Venezuela, que plantean amenazas para la seguridad de EEUU. De hecho, “la irrupción de China en la región podría hacer que Washington deje de dar por hecho la influencia que ejerce y ofrece una mayor atención y recursos a la misma”.

El centro de investigación Woodrow Wilson International Center for Scholars publicó en 2007 un informe, titulado Enter the dragon? China’s presence in Latin America, en el cual se describen las oportunidades que arroja la creciente presencia china y las respuestas de EEUU al fenómeno del auge de la estrella roja en Latinoamérica. La investigadora Cynthia Watson explica que “Latinoamérica estaba muy alejada de China, separada por el Océano Pacífico, y la Doctrina Monroe servia de instrumento político de control efectivo sobre Pekín,” y recomienda a EEUU que reconsidere su planteamiento dadas las perspectivas e implicaciones políticas y económicas para sus alianzas estratégicas, y no como una simple área de influencia más.

El investigador Evan Ellis considera que “el compromiso chino en Latinoamérica generará una compleja mezcla de oportunidades y amenazas para los países de la región y Estados Unidos.”

Por otro lado, el profesor Rhys Jenkins ha estudiado las circunstancias en las cuales China ha desplegado su poder en Latinoamérica, y llega a la conclusión de que “China ha pecado de optimista y subestima ciertos efectos negativos asociados a la competitividad china en la fabricación y la creciente especialización en productos básicos de Latinoamérica.”

Según su análisis, los países latinoamericanos saldrán perdiendo a consecuencia de la expansión económica china en la relación bilateral entre ambas regiones.

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Wu Yin-Shi aspira con la presente tesis al grado de Doctor en el Departamento de Derecho Internacional Público y Relaciones Internacionales de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociología de la Universidad Complutense de Madrid. La tesis doctoral se encuentra en la sección de documentos digitales del sitio web de la Universidad Complutense de Madrid. 

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