Como las tradiciones deben adaptarse para sobrevivir el paso del tiempo, la red social Wechat tomó la costumbre centenaria de entregar sobres rojos en año nuevo y la revitalizó para convertirla en un fenómeno en línea.
Así como los niños en Occidente esperan ansiosos la llegada de Santa Claus y los regalos de navidad, en China (y en varios países del Lejano Oriente) los niños aguardan ilusionados la llegada del año nuevo lunar para recibir su preciado sobre rojo –o hongbao–, una tradición que consiste en darle dinero a los familiares en fechas especiales.
Sin embargo, en este festival de primavera todo el mundo parecía estar más pendiente de su celular que de las celebraciones que estaban ocurriendo en casa. Los rostros de los jóvenes se iluminaban no por la alegría de compartir con familiares, sino cada vez que aparecía una notificación en el teléfono. No se trataba de mensajes de sus seres queridos deseándoles un feliz año del caballo, sino de sobres rojos electrónicos enviados a través la red social Wechat.
Weixin, como se conoce la aplicación para celulares en China, lanzó su estrategia de sobres rojos electrónicos como antesala a las celebraciones del festival de primavera. La idea es que un usuario utiliza una tarjeta de crédito para comprar un hongbao con el monto que especifique y lo envía a quien desee en su lista de contactos. Por su parte, el receptor recibe el dinero en su propia tarjeta de crédito.
El 29 de enero el sistema no daba abasto y constantemente arrojaba un mensaje que decía: “Perdón, estoy demasiado ocupado en este momento. Por favor intente más tarde”. Un pequeño experimento de un periodista del portal Minxin indicó que tan solo el 30 de enero (noche vieja) había recibido más de 20 sobres rojos con montos que oscilaban entre 0.01 y 19 yuanes.
Los sobres rojos a través de Wechat se han convertido en el pasatiempo nacional, al punto en que la primera pregunta que se hacen dos amigos al encontrarse es: “¿Cuántos sobres has recibido hoy?”. Lo importante no es el monto, sino la cantidad de sobres, pues lo que cuenta es la intención y el hecho de poder desear los mejores éxitos para el año del caballo de forma novedosa.
La estrategia de Wechat tuvo sus problemas. Tal vez los promotores no esperaban un intercambio de sobres tan masivo, pero lo cierto es que la red colapsaba, la aplicación no era capaz de procesar la cantidad de peticiones, y muchos usuarios se quejaron de que algunos de los sobres que compraron no llegaron a sus destinos.
Sin embargo, el éxito sobrepasó los inconvenientes con creces. Más de 5 millones de usuarios se volcaron a Wechat para enviar o recibir hongbao entre la noche vieja y el primer día del año lunar a un promedio de 9412 sobres por minuto. Si la tradición de los sobres rojos alguna vez peligró, la nueva dinámica de Wechat le augura una larga vida y un excelente año del caballo.
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