La política del hijo único desde la perspectiva de una hija única

In by Andrea Pira

La estudiante universitaria china Xu Xiaoyi comparte con China Files su opinión sobre la política del hijo único, como hija única. Es un testimonio personal. No hemos editado sus opiniones ni su contenido, que no representan la posición de China Files. Es un texto valioso porque presenta las contradicciones que causa en China la política del hijo único entre la generación joven, mientras el gobierno inicia las reformas más profundas en los últimos 30 años a esta medida.
Nunca he jugado fútbol con un hermano, tampoco he compartido mis secretos con una hermana. La razón es muy simple: soy hija única. No es cierto que mis padres no quieran tener otros hijos. La verdad es que no pueden hacerlo por la política del hijo único de China, un asunto controversial en mi país. Esta política ha afectado mi vida desde mi nacimiento.

Las autoridades chinas han dicho que la política del hijo único mitiga los problemas sociales que se crean por su enorme población. El argumento a favor de esta política es que si nacen menos bebés es más fácil que el país sostenga a su población con recursos limitados. Además, el gobierno espera que haya menos competencia en la sociedad, y sea posible para las personas matricularse en las mejores escuelas y obtener los trabajos más competitivos.

Aunque estos puntos no son completamente irrazonables, no estoy de acuerdo con esta política porque crea muchos problemas sociales. Primero, esta política ha creado el problema del “cuatro-dos-uno”: el hijo único tendrá que proporcionar apoyo a sus dos padres y sus cuatro abuelos en el futuro. En mi caso personal, por ejemplo, como no tengo hermanos que puedan compartir esta responsabilidad conmigo, tendré mucha presión económica. También, como hija única, todos los miembros de mi familia desean que sobresalga en todas las materias académicas. Tienen expectativas muy altas de mis estudios y mi carrera.

Aunque eso sea una forma de motivación, a veces es una causa de estrés. Mis compañeros de clase también tienen altas expectativas familiares. Como consecuencia, todos nosotros pasamos todo el tiempo estudiando. Casi nunca jugamos o nos relajamos. Hay mucha competencia entre los estudiantes en China por matricularse en las mejores universidades y buscar los trabajos más prestigiosos. Por eso, no estoy de acuerdo con el gobierno chino cuando dice que hay menos competencia en las escuelas y el mercado laboral porque hay menos personas en mi generación.

La política también ha resultado en más discriminación en contra del “sexo inferior”. He escuchado que en el pueblo donde viven mis tíos, la mayoría de las parejas han decidido abortar sus bebés después de descubrir que sus bebés son niñas en lugar de niños. Como sólo pueden tener un hijo por el mandato de las leyes, muchas parejas desean que su hijo sea un niño, porque la cultura tradicional china considera que los varones son superiores a las mujeres. Creo que la decisión de quitarle a un ser el derecho a la vida es una violación de los derechos humanos. Puesto que no es ética, el argumento de que esta política alivia los problemas sociales no es convincente.

Para las parejas chinas no existen muchas soluciones para este problema además de abortar a los bebés del “sexo inferior”. Sin embargo, algunas parejas ricas han pensando en una solución para tener más hijos. Como no pueden tener más de un hijo en su proprio país, las mujeres embarazadas viajan a otros países para dar a luz a más hijos. Esto ha resultado en problemas sociales para otros países. Por ejemplo, este fenómeno, que se llama “turismo de natalidad”, ha creado una escasez de cuartos y de recursos humanos en los hospitales en Hong Kong y Singapur. Como consecuencia, los otros países no pueden ayudar a sus propias mujeres embarazadas con suficientes recursos, y la gente de estos países odia a los chinos.

Estos no son los únicos problemas que resultan por la política del hijo único. La Comisión de Planificación Poblacional y Social de China predice que en 2020 habrá 30 millones más hombres que mujeres en la sociedad. Esta predicción muestra que la demografía del país en el futuro no será natural. Pienso que la sociedad china sería ridícula, con 30 millones de hombres que potencialmente no puedan encontrar esposas.

La lista de los impactos negativos que resultan de la política del hijo único es muy larga. He escrito sobre mi experiencia personal y los casos en la sociedad china para presentar los varios argumentos en contra de la política del hijo único. Aunque hay algunos beneficios económicos y sociales, creo que hay más implicaciones negativas de la política, no sólo para China en el presente y en el futuro, sino también para otros países. Como hija única, estoy en contra de esta política inmoral y creo que necesitamos cambiarla lo más antes posible. 

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[Crédito foto: Espacio360°]