En un juicio a puerta cerrada el abogado activista Xu Zhiyong, uno de los fundadores de la iniciativa Constitución Abierta y del grupo Nuevo Movimiento Ciudadano fue condenado a cuatro años de prisión. Se lo acusa de "alterar el orden público" .
Xu Zhiyong: abogado y activista. Hasta hace poco tolerado por el gobierno, e incluso con buenas relaciones dentro del Partido, cofundador de la iniciativa Constitución Abierta y del grupo Nuevo Movimiento Ciudadano, fue condenado ayer a cuatro años de prisión. Xu ha estado a a la vanguardia de las campañas por los derechos en China desde hace ya una década. Hoy serán juzgados sus siete compañeros.
El Tribunal de Beijing número 1 anunció ayer en su cuenta oficial de weibo que había encontrado a Xu culpable de " reunir una multitud para alterar el orden público " tras el juicio del miércoles pasado.
El abogado de Xu Zhang Qingfang dijo a Reuters que se reuniría con Xu en los próximos dos días para discutir si se debe apelar o no a la sentencia. Durante todo el juicio Xu y su abogado permanecieron en silencio, pues no querían participar de un juicio que les resultaba “una farsa”. "Me dijo en el tribunal que la última dignidad restante del sistema legal chino ha sido destruida ", dijo Zhang el viernes pasado.
"No es que no podamos aceptar la sentencia, simplemente creemos que todo el proceso ha sido ilegal, poco razonable e injusto ", agregó. Amnistía Internacional describió la sentencia como " vergonzosa pero tristemente predecible " , mientras que la Unión Europea ha pedido que se revoque la medida.
Teng Biao, uno de los fundadores del movimiento y amigo cercano de Xu , escribió en Twitter: "La sentencia de Xu Zhiyong pisotea imperio de la ley y es una provocación a los ciudadanos. La prisión nunca suprime la voluntad del pueblo para resistir, si no que enciende aún más fervor de lucha" . Roseann Rife, directora de investigación de Asia al este de Amnistía Internacional , dijo : "Las autoridades chinas han optado una vez más por el estado de miedo sobre el imperio de la ley. "El mensaje enviado desde la sala de audiencias es mucho más profundo: en China , Xi Jinping y el Partido Comunista mantiene un monopolio en el proceso político y cualquier persona que se oponga a eso será severamente tratado", agregó.
El juicio ocurrió en la semana en que el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación reveló las fortunas de los miembros del Partido y sus familiares en paraísos fiscales. En estos momentos de intensidad poítica los principales medios internacionales -The Guardian, El País, New York Times, entre otros- se encuentran bloqueados.
"Esta es una sentencia política cuidadosamente elaborada, diseñada para enviar un mensaje” dijo Nicholas Bequelin , investigador de Asia de Human Rights Watch. "El hecho de que no haya recibido la máxima sentencia (cinco años) es para dar la impresión de que la sentencia fue de alguna forma valorada por el tribunal . Se parece más a un resultado premeditado para dar la impresión de que el gobierno mostró un poco de clemencia y que hubo un proceso jurídico real – lo que obviamente es una mentira " , agregó.
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