China se debate entre las medidas rigurosas para prevenir el VIH / Sida y la protección a la privacidad

In by Simone

China está preocupada por el incremento en los casos de VIH / Sida. Pero las propuestas de ley diseñadas precisamente para frenarlo están encontrando gran resistencia entre los ciudadanos, preocupados porque podrían violar su privacidad. La provincia de Guangxi en el suroccidente de China, que cuenta con una de las mayores tasas de prevalencia del virus, acaba de proponer una ley que obligaría a los portadores del virus a notificar a sus parejas en tres días. La obligatoriedad de dar el nombre también ya generado controversia en lugares como Beijing.
El debate sobre cómo frenar el incremento en el contagio del VIH es complejo. Si las autoridades de salud tuviesen los nombres de las personas seropositivas, ¿podrían brindarles mejor atención médica? Pero, en un país donde los portadores del VIH son discriminados muchas veces abiertamente, ¿una norma que los obliga a dar sus datos personales incrementaría el número de pruebas o ahuyentaría a mucha gente? ¿Debe obligarse por ley a una persona a notificar a su pareja sentimental? Y si la persona no la notifica, ¿debe el Estado hacerlo? Esas son algunas de las inquietudes que preocupan actualmente a autoridades sanitarias, activistas y ciudadanos en China y que han encontrado muy diferentes respuestas, según quien lo mire. 

“Debido a que Guangxi ha sido golpeada duramente por el VIH / Sida y que el sexo se ha convertido en un medio de transmisión, estas reglas ayudarán a proteger a las parejas de los portadores y a evitar transmisiones secundarias”, señaló Ge Xianmin, director provincial de prevención del VIH / Sida, a la agencia Xinhua. Para Ge, la preocupante situación en la provincia fronteriza con Vietnam amerita una solución como esa. Al fin y al cabo, según sus estadísticas, el 87% de los contagios se han dado por transmisión sexual. Y muchas personas, añade, se desaparecen después de recibir la confirmación de su seropositividad, haciendo imposible una asistencia psicológica y un control médico.

Pero muchos ciudadanos y grupos de prevención del VIH / Sida han atacado la medida, con el argumento de que el temor a ser expuestos podría motivar a muchos chinos a no hacerse la prueba debido a los niveles de discriminación que deben enfrentar los portadores del virus. Su angustia es comprensible si se tiene en cuenta que son comunes los reportes de personas que han sido descalificadas para un puesto, tanto en el sector público como en el privado, por su estatus seropositivo.

En la actualidad la mayoría de las provincias ofrecen pruebas del VIH / Sida de manera anónima, mientras que la confirmación a una prueba positiva requiere que el paciente registre sus datos personales. Yunnan, junto con Henan la provincia con mayor prevalencia del virus, ha sido una de las pocas en decretar la obligatoriedad de inscribirse. En provincias como Gansu, que también la instituyó, al parecer no se ha registrado protestas, pero el diario China Daily señaló el año pasado que el número de personas que se habían realizado la prueba en Beijing había descendido considerablemente desde que las autoridades de salud de la capital terminasen con la política del anonimato en agosto.

Desde el año pasado China ha dado señales de estar preocupada por el tema, desde que se reveló que en los últimos dos años 40 mil personas han contraído el VIH en el país, según las estadísticas recopiladas por el Ministerio de Salud, la OMS y ONUSIDA. En la actualidad hay 346 mil personas portadoras del VIH registradas en China y se estima que el total, incluyendo a quienes no saben que son seropositivas, rondaría los 780 mil.

Hace un par de meses, un grupo de expertos consultados por el Ministerio de Salud concluyó que este año se producirían 28 mil muertes a causa del Sida. “El Sida es una enfermedad prevalente en China, con el número de pacientes cada vez mayor”, fue la conclusión del grupo de expertos, que pidieron más atención y menos discriminación para los portadores del virus. “La enfermedad comienza a tener un impacto en la economía y la sociedad", escribió el grupo de expertos en su informe final.



Sus conclusiones muestran que los años de silencio en torno a la enfermedad han enmascarado el problema: desde 1985, fecha en que se produjo la primera muerte ligada al Sida, hasta hoy se han registrado 88 mil muertes a causa de la enfermedad. Casi la cuarta parte de ellas, 21 mil, se habrían producido este año.