Murió Kim Jong-il, dictador de Corea del Norte

In by Simone

Sucedió el sábado en uno de los países más herméticos del mundo, pero la noticia solamente se supo el lunes en la mañana. Murió Kim Jong-il, el dictador y presidente de Corea del Norte desde hace 17 años, según anunció la televisión estatal norcoreana. Inmediatamente después del anuncio, Corea del Sur decretó el máximo estado de alerta. Su vecino del norte cuenta, además de con la tecnología para desarrollar un arma nuclear, con un ejército de 1,1 millones de oficiales, que lo convierte en el quinto más grande del mundo.

Poco se sabe del ermitaño dictador de Corea del Norte, un país tan cerrado al mundo que es difícil obtener información confiable. La república comunista de unos 24 millones de habitantes -casi por completo cerrada a los occidentales, y en especial a los periodistas- sufre de manera crónica hambrunas y sequías, ocasionadas en gran medida por el aislamiento internacional al que ha estado sujeta a causa de su programa armamentista nuclear. Lo poco que se sabe es que es un país donde están severamente limitados los derechos a la libertad de expresión, de reunión y de manifestarse, y donde la propaganda oficial y la vida militar ocupan un lugar central en la vida de sus habitantes.

Ni siquiera son claros los datos de la biografía del “querido líder”, como le decían los ciudadanos de la república comunista nacida tras el final de la Segunda Guerra Mundial. Según la versión oficial, Kim Jong-il nació en una cabaña en el bosque en el Monte Paektu, durante la guerra y el dominio japonés de la península. Otras fuentes más confiables sostienen que habría nacido en Siberia, donde su familia se había refugiado durante la guerra.

En todo caso, el líder norcoreano era el hijo de Kim Il-sung, el autoproclamado “presidente eterno” que asumió las riendas de la república comunista y gobernó Pyongyang con mano de hierro durante 46 años, primero como primer ministro y luego como presidente. Tras su muerte en 1994 asumió las riendas del país su hijo, que instauró un estaliniano culto a su personalidad similar al de su padre.

En 2008 comenzaron a circular rumores sobre el frágil estado de salud del líder norcoreano, que explican que hace un convocara una conferencia plenaria del Partido de los Trabajadores por primera vez en tres décadas. En esa reunión, Kim ascendió a su tercer hijo, Kim Jong-un, al grado de general de cuatro estrellas y vicepresidente de la comisión militar del partido, presumiblemente preparándolo -y al país- para su sucederlo en el poder.

Si la vida de Kim Jong-il es borrosa, de Kim Jong-un se sabe aún menos. El joven había vivido en el casi completo anonimato antes de la pomposa ceremonia con la que se le dio la bienvenida en la cúpula del partido gobernante. Se estima que tendría 29 años. Su hermano mayor, Kim Jong-nam, habría perdido el favor de su padre cuando hace diez años fue detenido en Japón con un pasaporte falso, mientras teóricamente de disponía a visitar el parque de atracciones de Disneylandia. Hace un año, el primogénito del “querido líder” afirmó en una entrevista con la televisión japonesa que no buscaba el poder. “Personalmente estoy en contra de la sucesión familiar a una tercera generación de la familia”, señalaría el mayor de los Kim, que vive entre Beijing y Macao.

Este es el video del momento en el que la televisión norcoreana anuncia la noticia de la muerte del líder:




Para quienes están en China y no utilizan proxy, pueden ver el video aquí en YouKu.