Disney inauguró su primer parque de diversiones en China, en un intento por acaparar el creciente mercado de clase media que no encontraba este tipo de sitios de entretenimiento hasta este año. La inauguración de este parque temático en la ciudad de Shanghái también marca el inicio de una guerra entre la reconocida firma estadounidense y el hombre más rico de China, dispuesto a colonizar el negocio con su “Ciudad Wanda”.
En medio de fuegos artificiales que alumbraron un día de lluvia en Shanghái se abrieron las puertas a “decenas de miles” que se agolparon desde tempranas horas de la madrugada a las afueras del centro de diversiones más grande de Disney. “Teníamos que venir el primer día, esto es histórico”, dijo Bai Lirong al asegurar también que su personaje favorito era Elsa de la cinta Frozen.
El presidente y director ejecutivo de Disney, Bob Iger, y algunos políticos chinos de alto nivel fueron los encargados de cortar la cinta roja justo después de las 11 de la mañana, en una ceremonia realizada junto al castillo encantado.
La lluvia, símbolo de riqueza en China, fue la protagonista de la jornada: “Me gustaría llamar a esto la lluvia de dólares estadounidenses y renminbi (yuanes) chinos”, señaló Wang Yang, un alto directivo del Partido Comunista chino que asistió al evento de inauguración.
El sexto complejo de entretenimiento de Disney, y el cuarto fuera de Estados Unidos, ocupa una superficie cercana a los 4 kilómetros cuadrados, requirió una inversión de 5.500 millones de dólares, tendrá unos 10.000 empleados y el costo de entrada ronda los 499 yuanes (unos 75 dólares) por persona; cifras que sobrepasan cualquier otro proyecto en el que se hayan embarcado en el pasado.
Aunque se trata de un típico resort de Disney, con sus íconos más representativos, cuenta también con una amplia representación de la cultura tradicional como un pabellón de ensueño que fue construido en forma de mansión china, en el que se sirve la comida local y cuenta con un espacio denominado el Jardín de los 12 Amigos, en el cual se representan los 12 signos del zodiaco chino con personajes de Disney.
De momento, esta ha sido la mayor atracción y muchos de los primeros turistas, de los 15 millones que se esperan anualmente, se han tomado selfies junto a su personaje zodiacal. Además, los personajes del parque de diversiones en Shanghái se tomarán una pausa en la tarde para hacer tai chi con los visitantes.
“Queremos ofrecer a nuestros visitantes chinos una actuación con características de Disney con la que puedan identificarse”, dijo al canal local de televisión CCTV la asistente de producción del parque, Xu Chang.
Se espera que la estrella del parque sea Mulan, la única heroína china de Disney, quien tiene una sección especial dedicada a ella, junto a decenas de referencias de la cultura china como las peonías, la flor nacional de china, que están presentes en la aguja del icónico castillo, en el bordado de la falda de Minnie y en varios lugares del centro de entretenimiento.
"Al mezclar una empresa estadounidense con la belleza y el rico patrimonio cultural de China, este complejo captura la promesa de nuestra relación bilateral", escribió el presidente Barack Obama en un texto de felicitación.
Por su parte, el gobernante chino, Xi Jinping, aseguró en una carta que fue leída en la ceremonia de apertura que era un “firme partidario” de este tipo de parques: “Espero que Disney Shanghái pueda permanecer fiel a la idea del intercambio de felicidad, amistad y proporcione a los visitantes experiencias seguras, exclusivas y agradables", dijo.
Sin embargo, el nuevo parque de Shanghái deberá enfrentar la competencia de la “Ciudad Wanda”, un complejo turístico y hotelero ubicado en la cercana ciudad de Nanchang, que se promociona como el parque de diversiones de China para chinos y en el que la cultura tradicional de este país será el tema dominante.
“La moda del Mickey Mouse y el pato Donald” ya pasó, advirtió días atrás Wang Jianlin, el hombre más rico de China, en una entrevista con la televisión local en la que criticó la “invasión” de culturas extranjeras y aseguró que el objetivo es ser un “modelo que permita afirmar la fuerza de la influencia de los chinos en el ámbito cultural”.
La primera “Ciudad Wanda” abrió sus puertas a finales del mes pasado, pero el proyecto de Wang es construir 15 de estas ciudadelas en territorio chino para asfixiar y hacer poco “rentable” para Disney el mercado de los parques de atracciones en el gigante asiático durante los próximos 10 años.
“El tigre solitario de Disney no es competencia para nuestra jauría de lobos”, arremetió el magnate chino que pretende expandir la “Ciudad Wanda” a otros países con un plan inicial de construir las primeras cinco alrededor del mundo antes de 2020.
El Parque Disney y La Ciudad Wanda son parte de un intento por satisfacer la creciente industria turística china y hacen parte de los esfuerzos del gobierno en su búsqueda de impulsar ese sector que hoy representa el 10 por ciento del PIB nacional, según las más recientes estadísticas del Consejo Mundial de Viajes y Turismo.
Sin embargo, en los últimos años las autoridades se han enfrentado con la dificultad de manejar los inmensos flujos de adinerados viajeros locales que escogen visitar los mismos lugares culturalmente tradicionales o paisajísticos en los mismos periodos del año. La manera como el mercado reaccionó a esa concentración fue proponer proyectos que fueran diseñados para las masas como los parques de diversiones con características chinas.
Con la apertura de Disney Shanghái Resort se da inicio a una nueva guerra comercial en la que la creciente clase media china tendrá que decidir si es mejor gastar sus yuanes en el mágico mundo de Disney o en la tradicional Ciudad Wanda.
[Crédito foto: Getty/Spoleto City]
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