“El ascenso de China en la dominación mundial es un hecho que define nuestra época”: David Cameron

In by Andrea Pira

Mientras la atención del mundo en Asia se centra en las tensiones relaciones entre China y Japón -además de la participación de Estados Unidos en la discusión-, el primer ministro británico David Cameron arribó hoy a Beijing anunciando que “Gran Bretaña será el más fuerte defensor de China en el mundo occidental”, según reporta el diario británico The Guardian.
Con su visita, Cameron espera borrar de la memoria china la visita que el Dalai Lama realizó a Londres el año pasado, además de reforzar los lazos políticos y económicos de las dos potencias. Esta es la segunda visita oficial de Cameron a suelo chino desde que asumió el cargo en mayo de 2010, pues ya en noviembre del mismo año había pisado Beijing.

“El Reino Unido está tratando de eliminar por fin las persistentes tensiones que resultaron de la reunión del año pasado entre Cameron y el Dalai Lama", dijo al China Daily David Dickinson, profesor de economía china en la Universidad de Birmingham. En mayo, Cameron aseguró en el Parlamento inglés que “el Reino Unido no apoya la independencia del Tíbet" y que tenía no tenía planes para reunirse nuevamente con el Dalai Lama.

La delegación británica está compuesta por 131 representantes, entre ellos la arquitecta Zaha Hadid, el ex futbolista inglés Graeme Le Saux, el director del Consejo de Artes Inglés Peter Bazalgette, el jefe ejecutivo de Jaguar Land Rover Ralf Speth, y Karren Brady, vicepresidenta del equipo de fútbol West Ham United.

Esta es la comitiva más grande con la que Cameron ha viajado a país alguno, y con ella espera desarrollar uno de los proyectos más criticados por otros países europeos: el tratado de libre comercio entre China y la Unión Europea.

“La transformación de China es uno de los hechos que definen nuestra vida. El año pasado, China se convirtió en la mayor potencia comercial del mundo. El próximo año se convertirá en el mayor importador mundial de bienes, y en los años por venir se convertirá en la mayor economía del planeta”, escribió Cameron en un artículo publicado en la revista económica china Caixin.

“Debemos tener claro que existe una verdadera opción para todos los países sobre la manera de responder a esta creciente apertura. Pueden optar por ver el ascenso de China como una amenaza o una oportunidad. Pueden proteger sus mercados de China o abrir sus mercados a ella. Pueden tratar de cerrarle la puerta o darle la bienvenida como un socio en la mesa principal de los asuntos mundiales”.

En junio, el banco central de China anunció la firma de un acuerdo para establecer una línea swap –permuta financiera- con el Banco de Inglaterra (BOE) para impulsar el comercio bilateral y la estabilidad financiera. La línea swap facilitará la liquidez de yuanes en Londres y en los mercados extranjeros, así como los beneficios del comercio y la inversión bilateral, según informó la cadena estatal china de noticias Xinhua.

Además, representantes chinos y de la Unión Europea se reunieron el mes pasado en Beijing para iniciar conversaciones sobre un tratado de inversión bilateral. Actualmente la balanza comercial entre las partes es de 580 mil millones de dólares y para 2020 se espera que alcance el billón. Sobre esta base la Unión Europea se consolida como el mayor mercado de exportación de China, mientras que China es el segundo mayor mercado de exportación de la UE.

Mientras muchos países están dispuestos a impulsar el comercio con Beijing, hay temores de que un acuerdo de libre comercio a gran escala lleve a China a inundar Europa con productos baratos, no sólo por los bajos costos de los productos sino también por su mano de obra barata.

Sin embargo, Cameron asegura que Gran Bretaña se encuentra en una posición única para “profundizar el comercio y la inversión en la relación de la Unión Europea con China, basándose en el reciente lanzamiento de las negociaciones UE-China sobre la inversión y el compromiso continuo”. También afirmó que pondrá “todo su peso político” en la búsqueda del acuerdo.

“En pocas palabras, no hay ningún país en el mundo occidental más abierto a la inversión china, más capaz de satisfacer las demandas de los consumidores chinos, o más dispuesto a formar el caso de la apertura económica en el G8, el G20 y la Unión Europea. Y no hay ningún país más preparado para forjar un diálogo de respeto y entendimiento que pueda abordar cuestiones de interés y avanzar en nuestros intereses comunes en el mundo”, escribió Cameron en Caixin.

Cameron se reunió con Li Keqiang en horas de la mañana y en la tarde con Xi Jinping en la Casa de Huéspedes del Estado. En la noche volará a Shanghai –lugar de reclusión de un periodista británico desde hace cinco meses, por quien su hijo pidió a Cameron hacer todo lo posible por su pronta libarción-, y el miércoles visitará Chengdu donde finalizará su visita oficial.

La visita de Cameron contrasta con el conflicto creciente que se vive entre China y Japón. Mientras Estados Unidos reafirma su posición de colaboración con Japón, Gran Bretaña parece abrir una puerta que parecía cerrada después de la guerra comercial que se vivió en meses pasados entre China y la Unión Europea. En ella, empresas chinas fueron acusadas de vender paneles solares por debajo del precio establecido en el mercado mundial, causando pérdidas por más de 21 mil millones de dólares a empresas europeas según la Unión Europea, algo que China desmintió y respondió con la amenaza de incrementar los aranceles para las importaciones de coches alemanes y vinos franceses.

Ahora, las relaciones entre la Unión Europea y China parecen buscar un nuevo auge, falta esperar si la batuta liderada por Gran Bretaña logra su cometido.

También puedes leer:

– Cárcel maoista en Londres

– La amenaza diplomática y olímpica de China a Gran Bretaña

– Huawei de nuevo en la mira por sus acciones internacionales

[Crédito foto: www.itv.com]