Bo Xilai, ex secretario del Partido Comunista para la ciudad Chongqing, recibió este 22 de Septiembre la sentencia de cadena perpetua después de que el Tribunal Supremo de Jinan lo condenara por los cargos de corrupción, malversación de fondos y abuso de poder. Tanto los seguidores de Bo como sus detractores, manifestaron rápidamente sus opiniones en los microblogs Weibo y Twitter.
La sentencia dictada a Bo sugiere “una estrategia del gobierno chino”, pues al evitar la pena de muerte no habrán reacciones adversas en áreas donde Bo Xilai aún sigue siendo popular, mencionan fuentes anónimas en Twitter.
“Bo Xilai no es más que una víctima de las peleas entre los líderes de alto nivel en el partido”, comenta un grupo de personas de Chongqing en el periódico chino en Singapur, Lianhe Zaobao.
Mientras Bo Xilai formaba parte de los líderes del Partido Comunista, se encargó en la ciudad de Chongqing de promover fuertes campañas para erradicar el crimen organizado y exaltar los valores de la era Maoísta. Por esto, atrajo gran apoyo de lo que llamaban “La Nueva Izquierda”, además de la clase obrera del país disgustada por la corrupción del gobierno.
En Twitter, aquellos internautas que apoyan al ex líder político mencionaron: “¡Apoyamos la libertad y la democracia! Apoyamos a Bo Xilai y lo consideramos como un hijo de Jiang Jieshi” -un activista luchador de la democracia-, menciona el grupo “Miembros del derecho a la democracia y de apoyo a Bo Xilai”.
Bo Xilai es el tercer miembro del Partido Comunista que ha sido encarcelado por cargos de corrupción durante los últimos 15 años. Sin embargo, su sentencia es la más severa que se ha aplicado a un miembro de alto rango del gobierno, desde la era de Mao Zedong.
Jinhua, uno de los periódicos gubernamentales radicado en Beijing, comentó que este caso es una lección pública de derechos. El caso de Bo Xilai presenta “el espíritu del derecho” y mediante su proceso se educa a la gente.
En Weibo -el microblog más utilizado en China-, se mostraba unas horas antes del día de la sentencia, más de un millón de seguidores que apostaron por un número de años a los que Bo Xilai sería sentenciado. Algunos grupos inclusive anotaron 20 como mínimo.
Las autoridades chinas de internet han respondido eliminando los mensajes considerados inapropiados. Algunos analistas sugieren esta acción como una simple estrategia de intimidación.
“Es solo un show”, dijo un usuario en Weibo, quien discutía cómo los oficiales corruptos en China no le temen a ninguna decisión de la corte que sea menor a la pena de muerte.
La gran mayoría de comentarios en los microblogs contrarios a la decisión tomada por el juez, han sido eliminados, y hoy la opinión gubernamental es la que prima en la red.
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(Crédito foto: www.todayonline.com)