Vladimir Putin llegó ayer en Beijing, en una visita de tres días a China, para firmar una serie de acuerdos comerciales -valorados por 5,500 millones de dólares y fortalecer los vínculos políticos. Hoy se reunió con el Primer Ministro Wen Jiabao.
También tiene planeado reunirse con Hu Jintao y los presidentes de los países miembro de la Organización de Cooperación de Shanghai, un gruppo de seguridad regional formado por 6 países de Asia Central: China, Rusia, Kazajistán, Kirguistán, Tayikistán y Uzbekistán, y en el que India, Irán, Mongolia y Pakistán participan como observadores.
En la reunión con Wen, Putin firmó un acuerdo de 12 puntos, que incluyen, convenios comerciales -como la importación de gas ruso en China-, un memorando de entendimiento de un tren de alta velocidad en Rusia y la mutua notificación de misiles balísticos y el disparo de cohetes de transporte.
En su mensaje de felicitación a la República Popular con motivo de su sexagésimo aniversario, Putin y el presidente ruso Dmitry Medvedev resaltaron la "asociación estratégica" con Beijing, término reservado solo a los aliados cercanos y amigos. Otro tema pendiente será la coordinación de la diplomacia internacional, especialmente con respecto a Irán y Corea del Norte. Tanto China como Rusia constituyen el frente de la no sanción a los dos países.