Breve perfil de la contratista internacional china CAMC Engineering, donde era gerente la ex novia del presidente de Bolivia, Evo Morales.
La esbelta Gabriela Zapata, de 28 años, una de las gerentes en Bolivia hasta hace pocos días de la contratista internacional de ingeniería china CAMC Engineering, ex novia del presidente Evo Morales y madre de un hijo que tuvo con él en el año 2007, ha sido arrestada por fraude, luego de que el fiscal pidiera su detención por conocerse que planeaba salir del país.
CAMC Engineering tiene contratos con el gobierno de Bolivia por más de 500 millones de dólares. La mayoría son para construir ferrocarriles en las regiones de Santa Cruz y Cochabamba, y una fábrica para procesar silvina en Potosí.
Esta empresa de construcción e ingeniería se halla en la punta de lanza de la expansión que ha tenido China durante los últimos 15 años en los mercados de los países emergentes de América Latina, África, Asia y Europa.
Luo Yan, presidenta de CAMC Engineering, es la protagonista en una serie de fotografías que la muestran en la celebración de los 70 años de la victoria de China en la guerra contra Japón, en la ceremonia de inauguración de la tercera sesión legislativa del Congreso Nacional del Pueblo de China, sentada al lado del primer ministro Li Keqiang durante el Foro Empresarial y Económico Chino-Ruso, y junto a los presidentes Xi Jinping y Alexander Lukashenko, inspeccionando un parque industrial en Bielorrusia. Si bien CAMC, fundada en el 2001, fue listada en la bolsa de Shenzhen en el 2006 durante una oferta pública inicial de una porción de sus acciones, sus vínculos con el gobierno de China siguen siendo profundos.
Además de Bolivia, CAMC Engineering tiene varias operaciones en América Latina. En Venezuela, está desarrollando un acueducto en el estado de Falcón, en el marco de un contrato de 24,1 millones de dólares, así como una planta de energía en El Vigía. El gobierno del Ecuador firmó una línea de crédito de 1.000 millones de dólares con CMAC Engineering para desarrollar proyectos de agropecuarios y de saneamiento.
En África tiene proyectos en Ghana, Sierra Leona, Kenia, Mozambique, Zimbabue, Tanzania, Sudán y Zambia. En Asia, CMAC Engineering ha recibido contratos para proyectos en Myanmar, Laos y Cambodia.
En algunas situaciones se han generado escándalos de corrupción. En Zambia, por ejemplo, se abrió una investigación por fraudes relacionados con el contrato de carretera Mbala-Nakonde.
El modelo de expansión chino no es muy distinto al de las empresas norteamericanas y europeas que compiten por los contratos de gobierno en el mundo emergente. En todos los casos la competencia por los contratos abre oportunidades para el fraude y la corrupción, y entre menos transparencia tengan los sistemas donde se realizan los contratos habrá más probabilidad de ilegalidad.
Si bien China ha mejorado en su lucha contra la corrupción, proceso que se evidencia por su mejora de 17 puestos en el Índice de Percepción de Corrupción de Transparencia Internacional entre el 2014 y el 2015 (paso del puesto 100 al 83), puede haber una mezcla explosiva para los proyectos que desarrolle su soft power. Si sus compañías, que vienen de un sistema con poca transparencia judicial, operan en sistemas donde tampoco hay contrapesos entre las diferencias ramas del gobierno, se presenta un campo fértil para los negocios dudosos.
El escándalo en Bolivia es, por supuesto, uno de estos posibles casos.
[Crédito foto: Yahoo]
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