– Dos años después de la desaparición del vuelo MH370 las familias de las víctimas están reclamando por los daños
– Ministerio de Hacienda de China: "La ley también protege a los trabajadores"
Dos años después de la desaparición del vuelo MH370 las familias de las víctimas están reclamando por los daños
Transcurridos exactamente dos años y un día antes de la expiración de los términos legales para presentar una demanda, las familias de doce pasajeros del vuelo MH370 Malaysia Airlines recurrieron a un tribunal de Pekín para reclamar por los daños y tratar de entender qué fue lo que pasó realmente. Más de 32 familias chinas presentaron una demanda por separado en Malasia.
El MH370 desapareció el 8 de marzo de 2014 durante un vuelo de Kuala Lumpur a Pekín con 237 pasajeros a bordo, entre ellos 153 chinos, y doce miembros de la tripulación.
Cada familia demandó a Malaysia Airlines, a Boeing, a Rolls Royce (que produce motores de aviones) y a las compañías de seguros, un reembolso de entre un millón y medio y once millones de dólares, y la sentencia no puede venir antes de los dos años. Hasta la fecha, se cree que el avión se estrelló en el Océano Índico, en dirección de la ruta planificada. En julio pasado se encontró un trozo del MH370 en el mar de la isla francesa de Reunión, mientras que la semana pasada otros dos pedazos, que probablemente pertenecen al avión, se encontraron en una playa en Mozambique. La hipótesis más probable es la del "vuelo fantasma", debido al hecho de que no había nadie en los controles cuando el avión se estrelló en el mar.
Hasta ahora, la investigación ha costado 130 millones de dólares y, cual sea su resultado, terminará el próximo verano. Martin Dolan, director de la agencia australiana responsable de esta investigación, aseguró que es probable que el avión se encuentre antes de julio, pero hay dudas muy fuertes.
Ministerio de Hacienda de China: "La ley también protege a los trabajadores"
El ministro de Finanzas, Lou Jiwei, criticó con dureza en la televisión en vivo la ley de contrato de trabajo puesta en marcha en 2007 en China, que protege a los trabajadores contra los despidos y, al mismo tiempo, les permite dejar un trabajo sólo con un mes de antelación. Estas condiciones, de acuerdo con Lou, desalientan a los empresarios a invertir dinero y crear nuevos puestos de trabajo. Estas garantías son costos "altos", dijo Lou, por lo que existe el riesgo de que los inversores se desplacen a otras parte para abrir negocios. Ademas, de acuerdo con el ministro, la latitud excesiva hacia el trabajador cuando decide abandonar el trabajo coloca a China en ”una grave escasez de mano de obra altamente especializada", un problema para un país que quiere dar el salto a la "economía de servicios".