El Gobierno colombiano ha decidido que una de sus mayores prioridades a nivel internacional es la integración política y económica con Asia Pacífico, una región que ya reúne a 40 por ciento de la población mundial y engloba cerca del 43 por ciento del comercio mundial. Y parte del éxito de esa estrategia depende de que Colombia consiga convertirse en "socio estratégico" de China, según la meta que se ha propuesto el gobierno y que planteó este martes en Beijing la canciller, María Ángela Holguín.
Primicia de China Files.
Por ahora, los dos altos líderes con los que se reunió la Canciller dieron a entender que ven con buenos ojos la profundización en las relaciones bilaterales. "China quiere aumentar el flujo de inversión recíproca entre China y Colombia", señaló el viceprimer ministro Li Keqiang, probable sucesor del actual premier Wen Jiabao, tras la transición en el liderazgo prevista para octubre. "Debemos mantener el ímpetu de intercambio entre Colombia y China y relanzar la cooperación", dijo a su vez el Canciller chino Yang Jiechi.
En la agenda de la Canciller en China hubo dos temas fundamentales: el equilibrio de la balanza comercial -ya que Colombia tiene un déficit de 5.600 millones de dólares con Beijing- y la promoción de la inversión china en el país, especialmente en los sectores de infraestructura y energético, como estrategia para reducir ese desequilibrio.
El club de los socios de primer nivel
Beijing ha diseñado un particular sistema para catalogar sus relaciones diplomáticas con otros países, según tres criterios fundamentales: la importancia del país y de sus relaciones bilaterales con China, la intensidad de la cooperación entre los dos países y la decisión del gobierno chino de concederle el estatus de socio.
Según estos parámetros, existen tres categorías diferentes para las relaciones con China. En primer lugar se encuentran los países con los que Pekín mantiene "relaciones amistosas de cooperación", que traducen en un trato cordial pero con un limitado intercambio comercial. Es el caso de Cuba, un país cuyo comercio con China es -pese a las afinidades políticas- económicamente insignificante para Beijing. Le siguen los "socios de cooperación", que como Colombia y Bolivia se encuentran en un punto intermedio. Las relaciones diplomáticas son más activas, pero no suelen estar acompañadas por una agenda bilateral demasiado profunda en cuestiones diferentes a la política y el intercambio económico.
La máxima categoría, que Colombia aspira alcanzar, es la de "socio estratégico". "Sólo los países genuinamente relevantes para China reciben este título, sujeto a que se muestren dispuestos a profundizar aún más en el grado de cooperación entre las dos partes", explica el politólogo mexicano Jorge Domínguez en un informe publicado por Diálogo Interamericano. Las ventajas de este trato preferencial incluyen, según el investigador de Harvard, una mayor frecuencia en los intercambios de alto nivel, que a su vez impulsan una inversión china significativamente más alta y una mayor cooperación en temas científicos y técnicos.
El volumen comercial influye en la decisión política de conceder a un país este título, pero no es el único factor. Chile, que exportó casi 18.000 millones de dólares hacia China en 2011 y fue el primer país del mundo en firmar un tratado de libre comercio con Beijing, se convirtió en "socio estratégico" sólo hasta hace un año. En cambio, Argentina -con un comercio bilateral mucho menor- lo es desde hace ya ocho. Y Venezuela, cuyo intercambio comercial con China es bajo si se excluye el petróleo, lo consiguió hace ya un decenio.
Hasta el momento seis países latinoamericanos gozan de este trato preferencial. Además de Chile, Venezuela y Argentina, también lo tienen Brasil, México y Perú, que también firmó un TLC con China. El último país en conseguirlo fue Emiratos Árabes Unidos, durante la visita en enero del primer ministro Wen Jiabao en la que se firmaron varios acuerdos energéticos.
En busca de relaciones de alto nivel
Si uno de los indicadores claves del estado de las relaciones son los intercambios de alto nivel, hasta el momento en el caso de Colombia éstos han sido escasos. Los últimos tres presidentes colombianos -Ernesto Samper, Andrés Pastrana y Álvaro Uribe- han efectuado visitas oficiales a China, pero solamente Zhao Ziyang, primer ministro durante la presidencia de Deng Xiaoping, visitó Colombia en1985 por invitación de Belisario Betancur.
El actual presidente Hu Jintao viajó a Colombia, pero en 1997 cuando era uno de los nueve miembros de la cúpula del gobierno chino. Y su probable sucesor Xi Jinping, actual vicepresidente, lo hizo en 2009. Mientras tanto, Brasil y China efectuaron nueve visitas de alto nivel sólo entre 2008 y 2009.
Precisamente uno de los objetivos centrales de la visita de la Ministra a China era concretar una visita oficial del presidente Santos, posiblemente para mayo. Tanto el viceprimer ministro Li Keqiang como el Canciller Yang Jichie manifestaron, según la Cancillería colombiana, interés en que se realizara.
En el terreno económico también hay amplio terreno para trabajar. Si bien las exportaciones de Colombia hacia China han crecido significativamente en los últimos diez años, pasando del 0,2 por ciento del total en 2000 al 2,9 por ciento en 2009, la balanza comercial se inclina ampliamente hacia Pekín. De hecho hoy ya es nuestro segundo socio comercial.
Y ante la dificultad de aumentar exponencialmente el volumen de exportaciones colombianas, o reducir el de importaciones chinas, el gobierno ha centrado su atención en la inversión extranjera directa como manera de reducir el déficit entre los dos países. La Canciller destacó los sectores de infraestructura y energía como especialmente interesantes para Beijing e invitó a las empresas chinas a que formen parte del proceso de licitación. Al mismo tiempo, motivó al sector industrial chino a aprovechar las oportunidades de desarrollo de Colombia y a pensar en el país como una plataforma exportadora, dados los acuerdos comerciales con Estados Unidos, Canadá y la Unión Europea.
Artículo publicado en El Tiempo (Colombia)
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