En un mensaje de ocho minutos Abdullah Mansour, líder del Partido Islámico de Turkestán (TIP), reivindicó la autoría del ataque por parte de los muyahidines y dijo que se trataba “sólo del comienzo” de una serie de ataques contra las autoridades chinas.
Abdullah Mansour hizo responsable a su grupo de los ataques en Tian’anmen del lunes 28 de octubre y agregó que los combatientes uigures también deben apuntar el objetivo hacia el Gran Palacio del Pueblo, sede del Parlamento y lugar en donde el Partido Comunista de China lleva a cabo sus actividades legislativas y ceremoniales.
"¡Oh creyentes chinos, ustedes han engañado a Turkestán Oriental (nombre con el que los separatistas se refieren a Xinjiang) en los últimos 60 años, pero ahora se ha producido el despertar. La gente ha aprendido cuál es el verdadero enemigo y volvió a su propia religión". Dijo Mansour en un vídeo publicado en línea este fin de semana en un el Instituto de Búsqueda de Entidades Terroristas Internacionales (SITE), sitio web con sede en Bethesda, Maryland, que monitorea los foros yihadistas .
Aquel lunes 28 de octubre un vehículo se abrió paso entre un grupo de peatones bordeando las veredas de la plaza Tian’anmen hasta chocar e incendiarse frente a la foto de Mao, matando a cinco personas (tres turistas y las dos que iban dentro del vehículo) e hiriendo a 38.
Las autoridades chinas identificaron rápidamente a los atacantes como provenientes de la comunidad autónoma de Xinjiang, en donde la minoría rebelde uigur vive en tensión con los chinos han. "Esta revelación pone al desnudo la esencia terrorista de esta organización y también permite que las personas que recientemente sospechaban sobre la naturaleza del incidente puedan ver con claridad la verdad", dijo Qin Gang, el portavoz de la cancillería, en una conferencia de prensa el lunes pasado .
Los expertos en Xinjiang han argumentado que TIP no está organizado lo suficiente como para llevar a cabo un ataque terrorista sofisticado. El TIP se ha responsabilizado de los atentados en los autobuses en las ciudades chinas de Kunming y Shanghai y de las amenazas de ataques antes de los Juegos Olímpicos de Beijing 2008.
Un mes después de la explosión en Tian’anmen, nueve personas atacaron una estación de policía en Xinjiang y murieron en la contienda con los oficiales. Xinhua dijo que se trataba de un “ataque terrorista”.
La región de Xinjiang históricamente ha sido habitada por una mayoría musulmana turca e uigur, siempre cerca de las posiciones separatistas, y que predominaron en la región hasta que Beijing puso en marcha la campaña ‘Go West’, hace una década. La campaña tenía un un doble objetivo: por un lado, el desarrollo de la industrialización y por el otro la urbanización de grandes áreas del oeste de China.
"Go West" ha llegado a verter en la región noroeste millones de chinos Han y frescos yuanes que han cambiado radicalmente la zona , con lo que los uigures ya no son mayoría de la región. Beijing, por su parte considera al Tíbet y Xinjiang de la misma manera: un problema interno e incontestablemente un área de China.
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